BLACKARIA 2010 [VOSE]

País:
Año: 2010
Duración: 01h:11m:13s
Productor: Guillaume Beylard
Guión: François Gaillard
Director: François Gaillard, Christophe Robin
Reparto: Julie Baron, Michel Coste, Aurélie Godefroy, Anna Naigeon, Frédéric Sassine, …
Traducción y subtitulado: Eddie Lamorgue






Ángela, una bella joven, pasa las noches fantaseando acerca de su sensual y extraña vecina Anna María, una cautivadora adivina. Una noche, Ángela encuentra su cuerpo mutilado salvajemente. En estado de shock, rompe accidentalmente una bola de cristal. Un cristal que tiene la capacidad de leer el futuro. Ahora hará uso de ese poder de predicción para escapar de una violenta muerte que se ha vaticinado.

Blackaria comienza con un ojo en primer plano y los títulos de crédito atravesándolo al estilo de la famosa escena de Un perro andaluz (1929). Con esto, se puede vislumbrar lo que este modesto film francés nos va a ofrecer: una sucesión de homenajes y filias de sus directores.
Lo que pretende ser un neogiallo se convierte en una poderosa letanía de imágenes (las verdaderas protagonistas de la película) y reverencias al venerado (no sin razón) y muchas veces repudiado estilo italiano. Después de su visionado, resulta complicado saber si acabamos de ver una buena o una mala película, ya que es cierto que algunas secuencias son memorables (la del ascensor es grandiosa), pero el desconcierto que crea hace que se dude de su calidad. No olvidemos nunca que estamos ante un film barato, sin apenas medios, pero con muchas ganas de agradar a los fans del giallo (aunque no sea un giallo al uso, entre otras cosas porque se conoce la identidad del asesino demasiado pronto), llenito de referencias a los grandes realizadores del género. Así pues, la trama comienza de forma muy similar al exótico y singular giallo del gran Fulci Una historia perversa (1969), con una asesina clavadita a la de la obra maestra de Argento Rojo oscuro (1975), pero luego deriva, argumentalmente, en Repulsión (1965), para acabar, ilustrando la explicación del policía, en una serie de secuencias de split screen dignas del mejor Brian De Palma.
¿Cómo se digiere todo esto? Pues para un aficionado a estas influencias, es muy agradable de ver, ya que las referencias son tan obvias (aquí no hay toques ni sutilezas, sino explícitos homenajes) que cualquiera puede identificar las grandes películas del género sin dificultad. A todo esto hay que añadir la chillona fotografía roja a lo Argento, escenas casi fusiladas de maravillas como El destripador de Nueva York (1982) o Seis mujeres para el asesino (1964), la música a lo Goblin y las reverencias más solapadas como el apellido de Angela, Cozzi, en honor al singular director Luigi Cozzi. Pero aún hay más: hay mucha sangre, mucho gore, multitud de explícitos asesinatos y erotismo y despelote a raudales (con ese irresistible toque sensible francés), sin cortarse lo más mínimo.
Con todo esto, cualquiera puede pensar, sin ver "Blackaria", que estamos ante todo lo que un fan del género puede pedir, pero no es así, le falta mucha coherencia y algo más de ritmo, además del desconcierto de muchos segmentos que lastran el resultado final, sin mencionar las referencias demasiado cargantes a "Rojo oscuro" en infinidad de ocasiones, muñeca incluída. Y con una excelente canción mezcla de Goblin y Suede que adorna excepcionalmente los créditos finales, llegamos al final de este breve pero intenso homenaje freak galo a lo que fue una época dorada, un estilo de hacer cine, unos años '70 que fueron biblia para gente como yo, y sin duda para los dos directores de este modesto film, que brilla en ocasiones y que descoloca en muchas otras, pero al fin y al cabo, una buena muestra de cinefilia italianoide que bien merece, al menos, ser valorada por los fans, que es, básicamente, su único propósito.
-----------------------------------[Por Miguelteis]